pool-690034_1280

Aprovecha bien tu tiempo de descanso

Encontramos muy importante disfrutar la familia en nuestro tiempo de vacaciones, sin embargo, hay algo mas que es necesario poner como prioridad máxima: la salud. Pasamos la mayor parte de nuestros días laborales bajo techo y en medio de grandes edificios de cemento, por esto es urgente que este tiempo de descanso sea disfrutado cerca de la naturaleza, en medio del aire puro y recibiendo la luz solar.

La deficiencia de vitamina D es uno de los problemas que estamos afrontando en la actualidad, que se ha incrementado por el temor al cáncer de piel generado por los médicos, el cual realmente ocurre cuando el individuo tiene deficiencia de otros nutrientes que moderan el impacto del sol. 

Si optimizas tu nivel de vitamina D, ayudas a que tu cuerpo no generar deficiencias como:

    • Síndrome del ojo seco. 
    • Degeneración macular.
    • Enfermedades autoinmunes.
    • Enfermedades gastrointestinales.
    • Enfermedades infecciosas.
    • Enfermedades reumáticas inflamatorias.
    • Osteoporosis y fracturas de cadera
    • Enfermedad cardiovascular
    • Enfermedades neurológicas
    • Lupus
    • Apnea obstructiva del sueño
    • Debilidad ósea, caídas y fracturas
    • Obesidad y diabetes
    • Enfermedades neuro-degenerativas
    • Degeneración del ADN y obstrucción de los procesos metabólicos
    • Parto prematuro y complicaciones del embarazo

Otro aspecto importante de resaltar es que la vitamina D parece desempeñar un rol en la actividad de la serotonina, una hormona que equilibra el estado de ánimo, y la melatonina, una hormona que responde a la luz y la oscuridad.

El Trastorno Afectivo Estacional, SAD (por su sigla en inglés) es el estado depresivo o ánimo decaído muy frecuente en países con inviernos severos donde el día es muy corto y por lo tanto los periodos de luz son muy reducidos. Las personas con SAD son propensas a tener niveles mas bajos de serotonina y melatonina, causados muy probablemente por la falta de exposición a los rayos solares, lo que puede explicar su fatiga, cansancio y estado de ánimo deprimido, relacionados usualmente con este padecimiento. En estos casos es necesario acudir a suplementos orales. 

Realmente la vitamina D es una hormona esteroide que se obtiene principalmente de la exposición a los rayos del sol, y no por medio de la alimentación. De ahí que sea imperioso entender que necesitamos permanecer mas tiempo en el medio ambiente natural para el que fuimos creados, procurando invertir en toda suerte de distracciones al aire libre.

Síntomas que muestran que no estás recibiendo suficiente sol diario.

 El Dr. Mercola recomienda un análisis sanguíneo porque es la única manera de identificar definitivamente la deficiencia de vitamina D. Sin embargo, también hay algunos signos y síntomas generales que debes tomar en consideración, dice el Dr. Mercola.

Si alguna de las siguientes situaciones se aplica a tu caso, debes hacerte una prueba del nivel de vitamina D lo antes posible, y tomar medidas proactivas para elevarlo a un rango de 60 a 80 ng/mL:

1. Sudoración de la cabeza — De acuerdo con el investigador de la vitamina D, el Dr. Michael Holick, uno de los primeros signos clásicos de deficiencia de vitamina D es la sudoración de la cabeza.

De hecho, los médicos solían preguntarles a las nuevas madres sobre la sudoración de la cabeza de sus recién nacidos. La sudoración excesiva en los recién nacidos debido a irritabilidad neuro-muscular aún es descrita como un síntoma común y temprano de deficiencia de vitamina D.

2. Infecciones frecuentes — La vitamina D regula la expresión de los genes que influyen en el sistema inmunológico para atacar y destruir las bacterias y virus, por lo que las infecciones de todo tipo —incluyendo la gripe y resfriados— podrían ser un indicio de que hay una disfunción inmunológica, lo que probablemente significa que estas con deficiencia de vitamina D.

3. Síntomas neurológicos — En el 2006, los científicos evaluaron los efectos de la vitamina D en la salud mental de 80 pacientes de edad avanzada y encontraron que los que tenían niveles más bajos de vitamina D eran 11 veces más propensos a estar deprimidos que los que recibieron dosis saludables.

Así mismo, el mismo estudio encontró que los niveles bajos de vitamina D estaban relacionados con un bajo rendimiento cognitivo.

De igual manera, diversos estudios han vinculado la deficiencia de vitamina D con disfunción mental, confusión, falta de memoria y dificultad para concentrarse. Los dolores de cabeza y migrañas también están relacionados con bajos niveles de dicha vitamina.

4. Fatiga y somnolencia durante el día — Los estudios han vinculado los bajos niveles de vitamina D a la sensación de fatiga constante. En un caso, se descubrió que una mujer que padecía fatiga crónica y somnolencia durante el día (hipersomnia), dolor de espalda baja y dolores de cabeza diarios, tenía un nivel inferior a 6 ng/mL de vitamina D.

Sus síntomas desaparecieron una vez que elevó sus niveles a 39 ng/mL. Otro estudio encontró que las mujeres con niveles inferiores a 29 ng/mL de vitamina D eran más propensas a padecer fatiga que las mujeres con niveles superiores a 30 ng/mL.

5. Huesos adoloridosSegún Holick, muchas de las personas que acuden a un médico por dolores y molestias, en especial cuando se presentan junto con una sensación de fatiga, terminan siendo diagnosticados erróneamente con fibromialgia o síndrome de fatiga crónica.

En conclusión podemos decir que la exposición regular a los rayos del sol es la mejor manera de optimizar tus niveles de vitamina D, entonces busca tus mejores opciones y has hábitos que promuevan tu salud.

Tags: No tags

Déjanos tu comentario