Parashá Anual – Éxodo 35:1 – 38:20
Nombre de la Parashá: Vayak’hel – Convocó
Lecturas Complementarias: 1 Reyes 7:13-26 | Apocalipsis 15:5-8
Vayak’hel
El verbo hebreo vayak’hel, significa: ensamblar, convocar o reunir; está relacionado con KAHAL, cuyo significado es asamblea, convocación y congregación. KEHILA, es la palabra hebrea para designar lo que hoy conocemos como: IGLESIA, siendo esta una palabra griega que llegó a reemplazar a la hebrea. (Ver: ¿Reemplazó la Iglesia a Yisrael?)
Es muy notable que al iniciar la ejecución de todo lo relacionado con el Tabernáculo, asunto de suma importancia, de nuevo Yehováh hace énfasis en la observancia del Shabbat como algo de significado muy especial y su mención aquí, significa que a pesar de lo importante que fuera esa tarea, la observancia del Shabbat, estaba por encima de ella. En otras palabras, no hay nada tan importante que justifique quebrantar el Shabbat.
La Biblia define el Shabbat, como el séptimo día (iniciando el viernes a la caída del sol, hasta el sábado a la caída del sol). Los demás días de la semana se nombran en relación con el séptimo: Primer día, segundo día, etc. hasta llegar al Shabbat. Yehováh no le ha entregado a nadie la autoridad para cambiar el día de reposo. Daniel, enseña que el hecho de cambiar ese día, es un acto del espíritu del Anticristo, quien buscará cambiar los tiempos y las leyes: Daniel 7:25
La lectura de esta semana, continúa mostrando que al pueblo le fue ordenado tomar una ofrenda (Terumah) para Yehováh, de todo aquél que tenga “corazón generoso”. Esto significa que hay personas mezquinas que prefieren retenerlo todo para sí mismas. Yehováh quería solo lo que procediera de corazones agradecidos; de personas que valoraban lo que Él había hecho por ellas.
Yehováh podría haber provisto milagrosamente todo lo que se requería; pero Él quiso dar participación a Su pueblo, logrando de esta manera que todos desarrollaran una identidad particular con el Tabernáculo y todo lo que había allí.
La respuesta del pueblo fue tan generosa que Moshé tuvo que enviar un mensajero (pregón) por todo el campamento diciendo:
¡Ni hombre ni mujer prepare más material para las ofrendas del santuario! así se impidió al pueblo, ofrecer más. Exodo 36:6
Shaúl en las Escrituras Mesiánicas (Nuevo Testamento), se refiere también a la manera en que los seguidores de Yeshúa deben dar:
Pero esto digo: El que siembra escasamente, cosechará escasamente; y el que siembra abundantemente, cosechará abundantemente.
Cada uno dé como propuso en su corazón; no por tristeza o por obligación, porque Yehováh ama al dador alegre.
Y poderoso es Yehováh para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que teniendo en todo tiempo siempre todo lo necesario en todo, abundéis para toda buena obra. 2 Corintios 9:6-8
De la manera que se construyó el Tabernáculo con el aporte del pueblo, hoy Yehováh sigue dando oportunidad a sus hijos de aportar para construir “Su Templo”, es decir Su Kehilá, su congregación. Aquí no hablamos de edificios sofisticados con los mejores avances de tecnología y capacidad para albergar a miles, no. Cuando hablamos del Templo, hablamos de personas; de las piedras vivas que lo componen. Y es que mientras estemos en este mundo, aunque no seamos de él, son necesarios recursos financieros para hacer posible alcanzar, enseñar y ayudar a otros a caminar por la senda estrecha de la obediencia a la Toráh. Los hijos de Yehováh tenemos la oportunidad y la responsabilidad de aportar con corazón generoso y alegre, para que Su Palabra se extienda y alcance a aquellos que Él ha determinado que serán los herederos de la Salvación provista por Yeshúa.
Yehováh también dotó de habilidades especiales a diversas personas, quienes ejecutaron todo el trabajo del Tabernáculo, para que cumpliera las exigencias requeridas por Él. Así es que cuando recibimos una tarea de sus manos, Él nos capacita para hacerla. Nunca digas: no puedo! Si algo para hacer te llegó a las manos, ora y ponte en la tarea, porque YHVH estará contigo supliendo lo que te haga falta.
Aplicación Práctica
Yehováh siempre pondrá oportunidades para obedecer ante nosotros y hoy debemos ser diligentes en buscar maneras de dar. No esperemos a que nos pidan; ya hay suficientes personas en necesidad alrededor nuestro.
Otra alternativa es aportar para ministerios de los cuales nos estamos beneficiando, pues todos ellos tienen gastos que son requeridos para hacernos llegar la Palabra de nuestro padre y su instrucción.
Si eres de corazón generoso, no da con alegría y refleja así el carácter de nuestro Padre, uno de cuyos títulos es Yehováh Yireh: Yehováh proveedor.