Importancia de la Vitamina D
Por causa de la cuarentena a la que estamos sometidos es vital abordar este tema porque necesitamos buscar con diligencia las oportunidades de exponernos al sol, de recibir aire puro bien sea entre los arboles o en una playa de mar o lago, pues es antinatural que permanezcamos demasiado tiempo sin gozar de los ambientes naturales que nuestro Padre nos dio. Nuestra salud y la de los niños y adultos mayores, en algún momento se verá afectada por esta carencia. Por esto, aquí alguna información sobre la vitamina D.
Sin importar qué enfermedad estes sobrellevando, implementar en tu organismo la vitamina D traerá resultados positivos. Principalmente es necesaria para la correcta asimilación del calcio y el fósforo, produciendo huesos mas fuertes. La vitamina D se acumula en la piel, pudiéndose usar las reservas en tiempos de menos exposición. Si bien, la forma ideal para optimizar tu nivel de vitamina D es la exposición adecuada directa al sol, el uso de una cama de bronceado segura (exposición a los rayos UV) parece tener otros beneficios para la salud además de producir vitamina D.
Hallazgos científicos recientes
El Dr. Mercola comparte los hallazgos recientes a través de estudios que examinaron los efectos de la suplementación con vitamina D.
Reducción de la grasa visceral peligrosa. Los suplementos de vitamina D en conjunto con el entrenamiento de resistencia pueden ayudar a disminuir la medida de la relación entre su cadera y cintura—medida que ayuda a determinar el riesgo de diabetes tipo 2 y la enfermedad del corazón.
Beneficios para la salud ocular. Un estudio publicado recientemente descubrió que la suplementación con vitamina D3 ayuda a rejuvenecer los ojos al reducir la inflamación y la beta amiloide – un factor de riesgo para la degeneración macular relacionada con la edad, que es la principal causa de ceguera.
Disminución del riesgo de alzheimer por la presencia de vitamina D de fuentes alimenticias y de exposición al sol. Este componente mencionado, beta amiloide no es sólo un factor de riesgo para la degeneración macular, también se encuentra en los cerebros de pacientes con Alzheimer.
Ayuda a tratar la tuberculosis y disminuye las muertes por neumonía. La tuberculosis es una de las tres principales causas de muerte en mujeres de 15 a 44 años. Antes de que se comercializaran los antibióticos, a los pacientes les recetaban terapias de sol. Hoy la combinación de estas dos cosas hace que los pacientes se recuperen mas rápido. Según los investigadores, una de las formas en que la vitamina D ayuda a modular el sistema inmune es a través del calcitriol, el metabolito activo de la vitamina D, el cual induce las respuestas innatas antimicrobianas en su cuerpo y suprime las respuestas pro-inflamatorias citocinas.
Ayuda a controlar las convulsiones de la epilepsia. Se encontró que los receptores de la vitamina D se localizan en el cerebro por lo que las investigaciones en este sentido siguen adelante; igualmente las que tienen que ver con la esclerosis múltiple.
Exposición correcta al sol
Desafortunadamente, debido a décadas de información errónea dada por los medios de comunicación y los profesionales, muchas personas creen que deberían evitar el sol de mediodía y que necesitan utilizar protector solar constantemente. Lo cierto es que la exposición al sol debe ser progresiva, es decir que los primeros días, deberías limitarla para permitir que los melanocitos de tu cuerpo aceleren la capacidad de producir la pigmentación protectora que no sólo te da un bronceado, sino que también sirve para protegerlo en contra de la exposición excesiva. Si tienes la piel muy clara y tiendes a quemarte, entonces debes limitar la exposición inicial a unos cuantos minutos, en especial si te encuentras a mitad del verano. La piel que rodea tus ojos y tu rostro por lo general es mucho más delgada que la de otras partes del cuerpo y es relativamente un área pequeña, por lo que no contribuye mucho con la producción de vitamina D, por lo tanto debes protegerla todo el tiempo.
Los rayos del sol que ayudan a producir la vitamina D cuando tocan tu piel son los UVB que solo atraviesan la atmósfera cuando el sol alcanza una inclinación superior a 50 grados sobre el horizonte. Hay además otros factores, como la concentración de ozono, la altitud, la contaminación del aire, el suelo cubierto de nieve o hielo y las nubes, que también afectan la cantidad de rayos UVB que finalmente llegan hasta tu piel. Entonces entre mas cerca te encuentres de la zona tórrida, es decir de la linea del ecuador mas cantidad de días del año tendrás disponibles estos rayos y por una cantidad mayor de tiempo.
Si alguna vez llegaras a sufrir una quemadura a causa del sol es importante saber que el aloe vera o sábila es uno de los mejores elementos para ayudar a reparar la piel, ya que está cargado con poderosos gliconutrientes que aceleran la curación. Idealmente, es mejor utilizar el gel proveniente de una planta fresca, pero existen productos comerciales disponibles que tienen sábila activa. Lo ideal sería que no llegues a necesitarla, ya que estás siguiendo esta orientación, sin embargo siempre pueden ocurrir accidentes y es importante tener planes de contingencia para ello.
Suplementando la vitamina D
El Dr. Mercola aconseja:
Si optas por un suplemento, asegúrate de tomar vitamina D3 y no la forma sintética de vitamina D2. Esto es importante, ya que un reciente análisis realizado en 50 ensayos aleatorios controlados, que incluyeron un total de 94,000 participantes, mostró:
Una reducción del seis por ciento de muertes entre las personas que utilizan la vitamina D3, pero
Un aumento en el riesgo de dos por ciento entre las personas que tomaron vitamina D2
La única manera de determinar si estas dentro del rango terapéutico es realizando una prueba regularmente de tus niveles de vitamina D. Si eres como la mayoría de las personas, probablemente necesites más de 4,000 UI al día; pero de acuerdo con las investigaciones más recientes, la dosis ideal para los adultos es cerca de 8,000 UI al día.