Tanto como sea posible, conseguir los nutrientes que tu cuerpo necesita de los alimentos enteros, es lo ideal. Esto significa reducir al mínimo los alimentos procesados y los suplementos en cápsulas. Buscar las grasas saludables, los vegetales frescos, la carne de res de animales alimentados con pasto y de aves de corral, los productos lácteos crudos, los huevos orgánicos de gallinas de campo, las nueces y semillas, y las frutas en cantidad moderada.
Poniendo en práctica los siguientes consejos obtendrás grandes cantidades de nutrientes con poco esfuerzo; algunos de estos ya los hemos abordado anteriormente. La premisa de base es que necesitas comer cierta variedad de alimentos para obtener una amplia gama de nutrientes:
- Jugos de Vegetales: Estos te ayudan a consumir más vegetales de hojas verdes que son los alimentos mas densos de nutrientes del planeta; la meta es tres a cinco porciones por día. Además contienen muchos nutrientes que no se encuentran en ningún otro alimento, como por ejemplo el beta-caroteno.
- Alimentos Fermentados: Los alimentos fermentados apoyan las bacterias benéficas en el intestino, lo que ayuda con la absorción de minerales y en la producción de nutrientes como vitaminas del complejo B y la vitamina K2.
- Caldo de huesos: Los caldos y las sopas aparecen en las dietas bíblicas como vemos en Jueces 6:19, y los caldos de carne y de pescado han constituido el fundamento de la cocina tradicional de muchos países. A la sopa de pollo considerada por muchos como un “curalotodo”, hay quien la llama “la penicilina judia”. La sopa de pescado goza de la misma reputación. Los caldos de carne debidamente preparados, sobra decir de animales levantados sanamente, sin antibióticos y con pastura, son sumamente nutritivos y contienen minerales, cartílago, colágeno y electrolitos todos en una forma fácil de absorber. Además las cantidades generosas de gelatina de los caldos ayudan a la digestión y a sanar muchos desordenes intestinales, como la acidez estomacal, el síndrome de intestino irritable, la enfermedad de Crohn y la anemia. Se ha confirmado que el caldo ayuda a evitar y mitigar las enfermedades infecciosas.
- Germinados: Destacamos en este artículo los germinados pues pueden contener hasta 100 veces más enzimas que las frutas y vegetales crudos, permitiendo que tu cuerpo extraiga de los alimentos que consumes, más vitaminas, minerales, aminoácidos y ácidos grasos esenciales.
¿Qué son los Germinados?
Se llama germinación al proceso de transformación que sufre una semilla cuando entra en contacto con la humedad, ya sea en tierra o en un recipiente. Los cambios ocurridos en la semilla durante los primeros 5 a 7 días generan innumerables nutrientes, y es en este momento que aprovechamos para comerla porque es un alimento vivo y fresco con grandes cantidades de enzimas, minerales, oligoelementos y vitaminas.La Palabra de nuestro Padre hace muchas aplicaciones de este evento de la semilla. Y Yeshua también dijo, refiriéndose al potencial de vida de la semilla:
“Si el grano de trigo (semilla) no cae en tierra y muere, queda solo pero si muere, lleva mucho fruto” Jn 12:24.
Seguro habrás visto los germinados en una tienda de sándwiches o en la sección de frutas y verduras, se ven como hilos sueltos de color pálido con cabecitas que son las semillas abiertas. Seguramente los has probado pensando “No está mal”, por su sabor y textura fresca y vívida. Granos, semillas, verduras, todas pueden ser germinadas, tales como el trigo y la cebada, la lenteja, el cilantro, el brócoli y la quinoa, etc.
Cuando germinamos semillas, incrementamos las enzimas proteolíticas que hacen digeribles a los carbohidratos y las proteínas. Al comer alimentos que contienen enzimas digestivas, tu cuerpo no necesita producirlas y puede dedicarse a generar otras que no las podemos consumir. Después de un tiempo, la capacidad de tu cuerpo de producir enzimas se debilita, así como la capacidad de combatir enfermedades.
Germinados de 3 días contienen 10 a 100 veces mas glucorafanina, que es el inductor principal de enzimas de un vegetal maduro; esto también ayuda a proteger contra agentes químicos causantes de cáncer. Comer alimentos germinados no solo estimula el contenido de vitamina C antioxidante, sino que aumenta el contenido de clorofila, la cual crea un ambiente hostil para bacterias dañinas y desintoxica el cuerpo al mismo tiempo que refuerza los niveles de oxígeno y el sistema inmunológico.
Valor nutritivo de los germinados
La razón principal de comer germinados es la nutrición y la digestión. Es esencialmente sacar el mayor beneficio de una planta en la forma biológica más concentrada.
- Los germinados contienen hormonas que nos ayudan durante periodos críticos como: crecimiento, convalecencia, fatiga intelectual, estados depresivos, etc.
- Los germinados son fuentes de proteínas muy importantes.
- Tienen capacidad desintoxicante.
- Todas las plantas en su proceso de germinación (nacimiento, transformación) poseen un gran poder regenerativo y revitalizante único para mantener y recuperar la salud depurando el organismo.
- Los germinados son grandes aliados en la revitalización del sistema digestivo.
Próximamente compartiré algunos de los germinados que yo hago.