Basado en el Tema: Shabat y la buena salud por Yvette Alt Miller – 23/3/2014 – Aishlatino.com
Una celebración semanal de Shabbat —con sus comidas especiales y una pausa del ajetreo de la semana— pareciera ser ideal para mejorar la salud mental, física y emocional, de acuerdo a algunas de las últimas investigaciones que confirman que seguir la dirección de nuestro Padre siempre nos traerá beneficios.
El Shabbat mejora la salud mental por cuanto nos invita a dejar las preocupaciones de lado, cosa que en este acelerado y complejo mundo no resulta fácil. Nuestro Padre nos llama a ejercitar la fe, creyendo que Él tiene cuidado de nosotros, y cambiando el enfoque de nuestros pensamientos para ponerlos en sus alentadoras promesas. La salud emocional compartiendo sin afán con nuestros seres queridos, estrechando las relaciones como lo mencionaremos adelante. Y la salud física proveyendo el descanso que nuestro organismo necesita, porque “cambiar de actividad” no genera el verdadero descanso, como muchos así lo creen.
Los resultados de un estudio de 16 años de la Universidad de Columbia sobre los efectos de las comidas familiares en los niños fueron claros. Los investigadores encontraron consistentemente que:
“cuanto más seguido cenaron los hijos con sus padres, menor fue su tendencia a fumar, beber o drogarse, y que la relación paternal que se desarrolla en torno a la mesa es una de las herramientas más poderosas para criar niños saludables y libres de drogas”.
Los padres que se sientan a comer con sus hijos tienden a saber los nombres de sus maestros, a conocer a sus amigos y a estar al tanto de lo que pasa en la vida de sus hijos.
Los beneficios de comer juntos pueden ser aún mayores para la pareja. Investigadores del Proyecto Nacional de Matrimonio de la Universidad de Virginia encontraron que destinar tiempo para cenar juntos (aunque sea una vez por semana, en el peor de los casos) fortalece la relación entre el marido y su esposa, y también los ayuda a conocerse mejor. Shabbat, con sus comidas semanales y el recordatorio periódico de tomarse un tiempo para disfrutar de la compañía de la pareja, es un excelente momento para poner estas recomendaciones en práctica.
Aquí hay algunas sugerencias para entender la importancia de incorporar o de animar la costumbre de las comidas familiares a tu rutina semanal, en especial en Shabbat.
- Cenar en familia nos da la oportunidad para enfocarnos en los demás. Intenta apagar las distracciones —como la TV, los teléfonos y las computadoras— durante la comida. Deja que todos sepan que durante un rato, mientras están sentados en la mesa, tienen toda tu atención.
- Los detalles especiales —como usar vajilla bonita, servir comida casera diferente o vestirte bien— envía mensajes subliminales de que hay algo mejor en estas comidas. Fomentar una atmósfera un poquito más formal puede alentar a las personas a permanecer más tiempo en la mesa, a hablar y a disfrutar la comida en lugar de apurarse para que la cena acabe.
- Las tradiciones también pueden ayudar a hacer que las comidas de Shabbat sean más familiares; por ejemplo recordar a Yeshua con el pan y el vino, orando en Acción de Gracias por su sacrificio por nosotros puede ayudar a los niños (y a los adultos) a sentir que la comida es más que sólo los alimentos. Tener otras tradiciones familiares en este día también puede ayudar a que los miembros de la familia sientan que son privilegiados por celebrar el Shabbat, que el Shabbat es de ellos para disfrutarlo y sentirse cómodos con él.
Pausa la tecnología
Muchos de nosotros sentimos que estamos demasiado conectados a nuestros teléfonos, computadoras y demás. De hecho, un estudio de la fundación Kaiser Family encontró que los niños pasan todas sus horas activas (fuera de la escuela) usando un dispositivo electrónico.
Un estudio reciente especifica algunos de los beneficios de tomar un descanso de toda esta estimulación electrónica. Leslie A. Perlow, profesora de la escuela de negocios de Harvard, hizo que un grupo de ajetreados y poderosos consultores se turnaran para apagar el teléfono por la noche, una vez a la semana. Pese a que al principio enfrentó una gran oposición al experimento, pronto encontró que los participantes reportaron ser más felices, estar mas satisfechos con su balance familia-trabajo y tener sentimientos de empoderamiento.
El shabbat puede darnos un espacio para replicar esta experiencia. Aquí hay algunas sugerencias para tratar de romper el amarre a los dispositivos electrónicos una vez a la semana.
- Sal a pasear. Shabat es un día maravilloso para conectarse con la naturaleza. El origen del Shabbat es que Dios creó al mundo en seis días y luego descansó en el séptimo. Trata de usar tu Shabbat para apreciar la belleza del mundo que te rodea; ir de caminata nos puede sacar de nuestra rutina frente a una pantalla.
- Trata de enfocarte en tú yo interior. Tradicionalmente, Shabbat es un tiempo para concentrarte en tu lado espiritual. Ya sea compartiendo con otros creyentes, apartando un tiempo para orar, leyendo la Palabra con atención, o por medio de alguna otra actividad especial. Pasa algo de tiempo este Shabbat pensando en cuál es el objetivo de la vida.
- Disfruta la oportunidad para hablar con personas cara a cara. Haz un esfuerzo consciente para tener una conversación real, sin distracciones o interrupciones.
Platos especiales en Shabbat
En la observancia tradicional del Shabbat el pueblo judío acostumbra comidas mediterráneas, propias del entorno cultural de Israel. Un grupo de investigadores españoles encontraron que los pacientes reducían significativamente su riesgo de tener un infarto cerebral o al corazón si seguían una dieta mediterránea, rica en garbanzos, aceite de oliva, frutas, vegetales, nueces, pescado y carne. Como ya hemos dicho, hacer modificaciones en nuestra dieta cotidiana, buscando mejorar la salud es un valioso propósito, y ¿por qué no ir haciéndolo para la cena de Shabbat?
María Consuelo que buen artículo, mil gracias, el shabbat es una delicia