Números 26:52 – 27:23 | Banajaláh

Y habló Yehováh a Moshé, diciendo: A éstos se repartirá la tierra en heredad, según el número de nombres. A los más numerosos les aumentarás su heredad, y a los menos numerosos les disminuirás su heredad. A cada uno se le dará su heredad conforme a los empadronados. Sólo por sorteo se repartirá el país, y adquirirán la heredad por los nombres de las tribus paternas. Por sorteo se repartirá la heredad entre el grande y el pequeño. Números 26:52–56

La instrucción de Yehováh para Moshé fue clara: la tierra se repartirá por sorteo; esto significa por “suerte”. ¿Cómo lo hicieron? Seguramente una vez que llegaran ala tierra deberían demarcar las parcelas y posteriormente hacer el sorteo. No debió ser una tarea sencilla dada la variedad de familias. La Toráh no nos da detalles de la manera del sorteo.

En el presente acostumbramos a satanizar todo lo que tiene que ver son sorteos o con suerte; incluso hay quienes se escandalizan cuando otros usan expresiones como: “Que tengas buena suerte” ; pero no debemos ignorar que en la Escritura se menciona esto y que básicamente lo que debemos entender es que Yehováh es quien toma la decisión:

Jehová es la porción de mi herencia y de mi copa; Tú sustentas mi suerte. Salmo 16:5, RVR60

La suerte se echa en el regazo; Mas de Jehová es la decisión de ella. Proverbios 16:33 Reina-Valera 1960

Los dados se tiran sobre el tablero, pero su sentencia depende de Yahvé. Proverbios 16:33, Biblia de Jerusalén

Las suertes se echan en el regazo, Pero la decisión es de YHVH. Proverbios 16:33 Biblia Textual

La palabra suerte aparece 98 veces en las Escrituras! La mayoría de ellas en relación con lo que nosotros conocemos como “circunstancias de casualidad”. Pero en realidad quien está detrás de ellas, es Yehováh. En hebreo es la palabra “Pur“, de donde viene el nombre de la última celebración del año hebreo: Purim, es decir: suertes, en plural.

Porque Amán hijo de Hamedata agagueo, enemigo de todos los judíos, había ideado contra los judíos un plan para destruirlos, y había echado Pur, que quiere decir suerte, para consumirlos y acabar con ellos. Ester 9:24, RVR60

Notaremos que las suertes son usadas tanto por gente justa, como por los perversos; pero mantengamos en mente, que finalmente quien tiene el total control es nuestro padre: Yehováh.

¡Las mujeres sí cuentan delante de Yehováh!

El Capítulo 27 nos da un claro ejemplo de la justicia y equidad de Yehováh nuestro Padre ante el reclamo lícito de las hijas de Zelofejad.

Lee con atención y observa:

• La actitud respetuosa de las mujeres al presentar su demanda.
• Su argumento inteligente y justo.
• ¿Quién tomó la decisión de lo que se debería hacer?
• El estatuto que a partir de ésta situación se generó, fue para la posteridad.

Aprendemos que es lícito presentar nuestras inquietudes, mas siempre con la actitud correcta; es entonces cuando nuestro Padre en su justicia y misericordia se ocupa de ellas. Gracias a la acción de estas mujeres, sus hijos mantuvieron su herencia dentro de la nación de Israel.

Tiempo de partir

Y dijo Yehováh a Moshé: Sube a este monte de los Abarim, y contempla la tierra que he dado a los hijos de Yisrael. Y cuando la hayas contemplado, tú también serás reunido a tu pueblo, como fue reunido Aharón tu hermano, por cuanto fuisteis rebeldes a mis órdenes en el desierto de Zin, en aquella contienda de la congregación, y no me santificasteis ante los ojos de ellos, en el asunto de las aguas. (Estas son las aguas de Meribá de Cades, en el desierto de Zin). Números 27:12–14

Todos tenemos un tiempo en que debemos partir. Para Moshé había llegado tal momento y recibe instrucciones previas, no sin hacer memoria de la razón por la cual no podría cumplir su sueño de entrar al pueblo a la Tierra Prometida.

Reflexionemos acerca de cómo tanto Yehováh como Moshé, consideran la muerte. No es algo tan trágico como que todo se termina allí y es el final de todo; no. Tal parece que es solo una transición a otro estado: Ser reunidos con su pueblo y familia. 

Pero la verdad es que no tenemos revelación al respecto. ¿Significa esto que todos están dormidos? ¿O que van a reunirse conscientemente sabiendo quién es quién y van a pasarla en adelante juntos disfrutando de lo lindo? ¿Existirá acaso la dimensión tiempo, tal y como la conocemos? Lo cierto es que Yehováh le hace tal anuncio a Moshé como algo normal, y este lo acepta sin reparos.

Yahoshúa (Josué), sucesor de Moshé

Ante tal anuncio, Moshé entonces pide a Yehováh “una persona que vaya delante del pueblo para que los hijos de Yisrael no sean como ovejas que no tienen pastor”. Yehováh nombra a Yahoshúa (Josué) e instruye a Moshé para que la delegación se haga en público de manera que el pueblo entienda que esto es un proceso correcto y ordenado por Él.

Moshé pide a Yehováh, un varón sobre la Asamblea, que salga delante de ellos y que entre delante de ellos, que los saque y los introduzca, para que la congregación de Yehováh no sea como ovejas sin pastor.  Números 27:16-17

Hallamos en esta breve porción una buena descripción del rol de un líder:

• Debe conducir o guiar,
• Motivar a la acción,
• Modelar y
• Cuidar a sus seguidores.

Si lo vemos con atención, esto se resume con la palabra: servicio. Un líder de Yehováh sirve, mas no se enseñorea; motiva mas no impone; dirige mas no manipula; cuida mas no sobreprotege.

Yahoshúa fue un hombre que desde que se inició el proceso del Exodo, estuvo fiel al lado de Moshé y cuando fue enviado como parte de los doce espías, fue uno de los dos que trajeron un buen reporte, junto con Caleb. Todas estos detalles sumaron para que al final fuera elegido por Yehováh para tal responsabilidad.

Nada de sucesores familiares

¿Te das cuenta que no fue uno de los hijos de Moshé quien heredó el liderazgo de Yisrael? Que gran diferencia con lo que vemos suceder en el presente, donde los pastores heredan el ministerio a sus hijos, aún cuando muchos de estos no han recibido un llamamiento de Yehováh para servir; solo (si acaso) son profesionales graduados de un seminario por lo cual se creen capacitados para ejercer el ministerio y así transforman las iglesias en sus “negocios familiares” que deben ser mantenidos a todo costo para continuar con su estilo de vida, pero no tienen ni idea de lo que es la verdadera Asamblea de Yehováh y mucho menos de lo que significa ser un siervo del Altísimo.

Yahoshúa, es un tipo de Yeshúa, cuyo nombre completo también es Yahoshúa (Yeshúa ó Yehoshua son las versiones cortas de tal nombre).  De manera que mucho de lo que veremos en la vida de Yahoshúa, el siervo de Moshé, nos va a enseñar o aclarar aspectos diversos de la vida y obra de nuestro Mesías Yeshúa.