Basado en el libro Escape Root, del Dr. Scott Laird –
¿Qué son las enzimas?
Una enzima es una molécula de proteína energizada que existe en cada célula que inicia reacciones químicas. Nuestro cuerpo depende de las reacciones químicas para ver, escuchar, pensar, respirar y realizar prácticamente todas las funciones de las que es capaz. Las enzimas también facilitan la digestión y la utilización de nutrientes.
Hay tres tipos de enzimas: metabólicas, digestivas y alimentarias. Para ver si un artículo empaquetado contiene enzimas, busque la terminación “ase” al final de la palabra. Por ejemplo: El suplemento llamado Serrapeptase, es utilizado por el Dr. Scott con bastante frecuencia. Esta es una enzima proteolítica, lo que significa que “busca y destruye” el exceso de proteínas. En lenguaje sencillo, esto significa que se come la inflamación y las proteínas no digeridas, como coágulos de sangre, tejido cicatricial, quistes, moco, placa arterial e inflamación en todas sus formas sin ningún efecto secundario perjudicial. Es la misma enzima que utiliza el gusano de seda para disolver su capullo, que es una proteína. El Dr, Scott declara:
Cada vez que uno de los miembros de nuestra familia tiene un golpe o una contusión o una inflamación debido a un accidente, lo primero que hacemos es darle serrapeptase; la inflamación cede en una fracción de tiempo y le da a su cuerpo una ventaja en la curación.
Si decides ensayarla, recuerda que la serrapeptase debe tomarse con el estómago vacío. Si hay alimento en tu estómago, la serrapeptase se consumirá en digerir tus alimentos, en lugar de buscar proteínas no digeridas en otras partes de tu cuerpo.
Las enzimas metabólicas son las que promueven la producción de energía, la desintoxicación y la reparación celular. Las enzimas digestivas que descomponen los alimentos, se crean en el páncreas. Las enzimas alimentarias se encuentran en los alimentos crudos. Cada alimento crudo tiene sus propias enzimas que maduran, descomponen y digieren ese alimento en particular.
Cuando comes una manzana, por ejemplo, el Todopoderoso ha creado las enzimas en esa manzana para descomponer específicamente esa manzana en tu sistema digestivo, de modo que no tengas que usar tus propias enzimas digestivas (las de tu páncreas). Esta es la belleza de los alimentos crudos: ayudan a digerirse. La cocción y el procesamiento destruyen las enzimas que habrían ayudado a digerir los alimentos crudos (las enzimas se destruyen por el calor a más de 122°F). Al destruir todas las enzimas de los alimentos naturales con el calor, el trabajo de digerir alimentos cocidos o procesados ahora depende completamente de tus propias enzimas producidas en el páncreas. Este es el peligro de comer demasiada comida cocida.
Las enzimas comienzan a morir aproximadamente a 42ºC (108ºF) y están completamente muertas a 50ºC (122ºF). Ahora, piensa en esto: el agua hierve a 100ºC (212ºF); sin embargo, algunas personas afirman que cocinar brócoli al vapor, ¡lo conserva vivo! Bueno, ¿qué tan caliente es ese vapor? realmente es la misma temperatura del agua hirviendo, por lo tanto cocinar alimentos “al vapor” destruye las enzimas.
La fuerza vital de las enzimas puede verse mediante un proceso llamado fotografía Kirlian. Este fue desarrollado en 1939 por el inventor e investigador ruso Semyon Kirlian, pero no fue ampliamente reconocido hasta la década de 1960. La fotografía Kirlian es como una radiografía que revela la fuerza vital (enzimas) en los alimentos crudos. Aparecen en una película fotográfica como brillantes estrellas blancas en una noche clara. Por ejemplo, si una manzana se corta por la mitad y se coloca sobre una película fotográfica, entonces la película se carga con alto voltaje, la imagen resultante muestra a la manzana con “estrellas” igualmente brillantes y distribuidas uniformemente en toda la pulpa de la manzana. Pero si está cocida o desnaturalizada de alguna forma, la imagen muestra vastas áreas de oscuridad intercaladas con grupos de luz aleatorios e inconexos en intensidades variables, claramente diferentes a la apariencia natural y ordenada de la fuerza vital enzimática original, que se aprecia en la manzana cruda.
La vida en esa manzana es literalmente luz, lo que no debería sorprender cuando se considera que todo en esta tierra depende de la luz del sol; de la misma manera que Yeshua dijo: “Yo soy la luz y la vida”. Los alimentos vegetales almacenan esta energía luminosa como biofotones, (las más pequeñas unidades físicas de luz). Los biofotones son almacenados y utilizados tanto por las plantas como por el cuerpo humano, y juegan un papel importante en las reacciones bioquímicas de nuestro cuerpo. Entonces, los alimentos que almacenan la mayor cantidad de biofotones son los más nutritivos. Se transfieren al cuerpo humano cuando se consumen alimentos crudos, lo que proporciona energía al cuerpo para su curación. Increíble!
Si la luz y la vida se encuentran en alimentos vivos enzimáticamente, los alimentos cocidos o procesados que no están vivos sobrecargan el páncreas. A su vez, un páncreas sobrecargado se apoyará en el sistema inmunológico, una función llamada leucocitosis digestiva. El término leucocitosis se refiere a un aumento en los glóbulos blancos, lo que indica que el cuerpo está en modo de ataque; esto ocurre comúnmente cuando estás enfermo. Así, los alimentos cocinados pueden afectar el sistema inmunológico, si sobrecargas tu digestión con ellos. Con el tiempo, un páncreas y un sistema inmune que trabajan excesivamente, pueden representar un desastre para tu salud, ya que tu cuerpo carece de la luz y la vida que necesita para sobrevivir.