Cosas que podemos aprender durante la cuenta del Omer.
Conociendo el corazón de su pueblo, YHVH decidió llevarlos por el camino largo, tomando el cauce de un río seco para llegar a la playa conocida en la actualidad con el nombre de Nuweibaa. Allí acamparon bajo la nube durante el día y estuvieron protegidos por la columna de fuego durante la noche.
Tradicionalmente el Monte Sinay ha sido ubicado en la parte sur de la península del Sinaí en Egipto, lugar establecido por Helena la madre de Constantino en el siglo tercero. Pero el hallazgo reciente de dos pilares puestos por el rey Salomón en las dos orillas del lugar del cruce, identifican claramente el lugar por el que YHVH condujo a Yisrael hasta el real Monte Sinay en Arabia, tal y como el apóstol Shaúl lo declaró.
Lección 1:
En vista de que el pueblo no estaba aún entrenado para ir a la guerra, YHVH condujo a Su pueblo por un camino diferente al conocido. YHVH sabía lo que estaba haciendo, aunque el pueblo no lo entendía. Y así nos suele suceder hoy. Solo vemos lo que tenemos al frente, mas no alcanzamos a visualizar lo que nuestro Padre que está afuera de nuestros límites, puede ver. Por eso somos comparados con ovejas indefensas y miopes, que necesitan depender enteramente de su pastor.
Una vez en la playa, los yisraelitas se vieron atrapados con el mar por delante y el ejército de Paroh por detrás. Entonces si hubieran tenido oportunidad, seguramente se hubieran vuelto a Mitsráyim, porque así lo expresaron. Pero YHVH los había puesto en un lugar del que no había escape. Tenían que depender de Él!
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Éxodo 14:11 deja ver la queja del pueblo y su deseo de volverse a Mitsráyim. Ante la petición de Moshé YHVH le responde de una manera desconcertante: ¿Por qué clamas a Mi? Dile al pueblo que se pongan en marcha!
Lección 2:
Muchas veces YHVH espera que entremos en acción por fe, en vez de mantenernos haciéndole peticiones. Así entonces se llevó a cabo el milagro más grande registrado en el Tanak (Antiguo Testamento): la apertura del mar para dar a paso a Yisrael eliminando a sus enemigos de una vez. Los mitsritas (egipcios) reconocieron que era YHVH quien peleaba por los yisraelitas (vs. 25), pero ya fue tarde; no quedó ni uno de ellos e incluso el Paroh murió allí.
Entonces según el vs. 31, el pueblo temió a YHVH y creyó en Él y en Moshé, su siervo.
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La historia que se desarrolla a continuación es sorprendente porque nos parece increíble que después de semejante manifestación de poder, el pueblo esté quejándose, murmurando, desobedeciendo y anhelando haberse quedado en Mitsráyim! Aunque es fácil juzgar a nuestros ancestros, la verdad es que no somos muy diferentes de ellos.
Lección 3
Con facilidad olvidamos las grandes manifestaciones de YHVH a nuestro favor y nos sentimos abandonados e impotentes. Pero Yisrael estaba en entrenamiento, al igual que nosotros hoy; ellos necesitaban aprender a vivir en dependencia total de su Elohim y Libertador; necesitaban aprender que también era Proveedor, Protector, Legislador y Juez. YHVH tomó al pueblo de la misma manera que se adopta un hijo que requiere de amor, pero también de dirección y corrección.
El canto del capítulo 15 fue entonado por todo el pueblo y por Moshé, como si todo el pueblo hubiera profetizado al mismo tiempo; es decir como una manifestación más de YHVH.
Curiosamente, La Canción del Mar, como se conoce este cántico en la Toráh, es uno de los dos únicos pasajes donde el texto se escribe de manera diferente, como queriendo mostrar a los Yisraelitas caminando por en medio de las dos orillas del mar. (Ver foto adjunta)
Miryam, la hermana mayor de Moshé, que para entonces contaba con cerca de 90 años, (Moisés tenía 80), toma la iniciativa para liderar a las mujeres danzando y tocando el pandero mientras cantaban a YHVH.
Posteriormente, el pueblo enfrenta su primer desafío: no hay agua durante tres días, y cuando la hallan está contaminada. YHVH dirige a Moshé a usar un árbol que al ser echado en el agua la hizo apta para ser consumida.
Lección 4
De manera similar en nuestras vidas, cuando en medio de nuestra amargura acudimos a Yehováh por medio de Yeshúa, quien fue sacrificado en un madero, nuestras amarguras son cambiadas y la vida se torna más dulce por Su presencia.
Ante la queja del pueblo por la falta de comida, YHVH envía las codornices y hace la provisión del maná que representa también al Yeshúa como el pan que desciende del cielo. Las instrucciones eran precisas en cuanto a lo que deberían recoger entre semana y en particular el sexto día, víspera del Shabbat. Sin embargo, el pueblo desobedeció de nuevo. Nótese que para entonces el pueblo ya tenía conocimiento del Shabbat a pesar de que la Ley (Toráh) no había sido aún entregada.
Lección 5
Observemos que la oración de Yeshúa conocida como el Padre Nuestro, incluye la petición de recibir del Padre el pan de cada día. El Padre quería entrenar a su pueblo en ese sentido, llevándole a depender de Él en la provisión del pan diario desde entonces.
La respuesta de nuestros padres yisraelitas a las duras pruebas que tuvieron durante su estadía en el desierto es un ejemplo y una advertencia para nosotros los seguidores del Camino. Ellos a pesar de haber sido sacados de Mitsráyim y de haber visto las maravillas de YHVH, no pudieron entrar en la tierra prometida debido a su incredulidad; y la generación que fue testigo de todas esas manifestaciones, pereció en el desierto. Solo Yahoshúa (Josué) y Kaleb entraron en la tierra. Hebreos 3:19
Lección 6
La salvación no la tenemos garantizada. Muchos que han sido expuestos a la Verdad de Yeshúa, se quedarán por el camino, porque toman la senda ancha y evitan el sendero estrecho que conduce a la puerta estrecha. De tan gran multitud de personas mayores de 20 años que salieron de Mitsráyim, solo dos: Yahoshúa y Kaleb entraron en la Tierra Prometida. Así mismo, son muy pocos los que perseverarán hasta el fin y entonces serán salvos.